Los árboles caducifolios otoñales exhiben una amplia gama de colores vibrantes debido a cambios bioquímicos en sus hojas. Algunos de los más destacados y la explicación detrás de sus colores:

Arce (Acer spp.)
- Especies destacadas: Arce rojo (Acer rubrum), Arce azucarero (Acer saccharum), Arce japonés (Acer palmatum).
- Colores: Rojos intensos, naranjas y amarillos.
- Causa: Altos niveles de antocianinas (pigmentos rojos y púrpuras) que se producen en otoño, combinados con carotenoides (amarillos/naranjas).

Liquidámbar (Liquidambar styraciflua)
- Colores: Púrpura, rojo, naranja y amarillo en la misma hoja.
- Causa: Síntesis de antocianinas junto con la degradación de la clorofila, que revela carotenoides.

Roble (Quercus spp.)
- Especies destacadas: Roble rojo (Quercus rubra), Roble escarlata (Quercus coccinea).
- Colores: Marrones rojizos y bronce (los robles tienden a retener hojas más tiempo).
- Causa: Taninos (compuestos fenólicos) que dan tonos cobrizos, junto con antocianinas.

Abedul (Betula spp.)
- Colores: Amarillo dorado brillante.
- Causa: Carotenoides (siempre presentes pero enmascarados por la clorofila en verano).

Fresno (Fraxinus spp.)
- Colores: Amarillo puro o púrpura en algunas variedades.
- Causa: Predominio de carotenoides y xantofilas.

Ginkgo (Ginkgo biloba)
- Colores: Amarillo limón uniforme.
- Causa: Degradación eficiente de clorofila sin acumulación de otros pigmentos.

Cerezo ornamental (Prunus spp.)
- Colores: Naranjas y rojos cálidos.
- Causa: Antocianinas producidas como protección contra el estrés lumínico y frío.
¿Por qué estos colores?
El cambio se debe a tres procesos bioquímicos:
- Degradación de la clorofila (verde): En otoño, los árboles dejan de producir clorofila (necesaria para la fotosíntesis) y el pigmento se descompone, revelando otros colores.
- Carotenoides (amarillo/naranja): Siempre presentes en las hojas pero enmascarados por la clorofila. Ejemplos: beta-caroteno (zanahoria) y luteína.
- Antocianinas (rojo/púrpura): Producidas en otoño como respuesta al frío y la luz solar intensa. Actúan como “protector solar” para las hojas, permitiendo una mejor absorción de nutrientes antes de caer.
- Taninos (marrón): Resultado de los residuos celulares cuando otros pigmentos se descomponen (comunes en robles y hayas).
Factores que influyen en la intensidad del color
- Clima: Días soleados y noches frías (pero sin heladas tempranas) maximizan la producción de antocianinas (rojos).
- Suelo: pH y nutrientes pueden afectar tonalidades (ej.: suelos ácidos intensifican rojos).
- Especie genética: Genética determina qué pigmentos predominan.
Estos árboles no solo son un espectáculo visual, sino que su adaptación evolutiva les permite reciclar nutrientes eficientemente antes del invierno.