Las azaleas dobles (Rhododendron spp.) son una de las variedades más espectaculares del mundo de los arbustos ornamentales. Con sus flores repletas de pétalos, que asemejan pequeños ramos de rosas en miniatura, estas plantas conquistan por su elegancia y versatilidad.
¿Qué las hace únicas?
A diferencia de las azaleas comunes, las variedades dobles presentan múltiples capas de pétalos, creando un efecto voluminoso y texturizado. Sus colores abarcan tonalidades vibrantes —rosados intensos, blancos puros, rojos coral— y su floración suele extenderse desde principios de invierno hasta comienzos de primavera, según la región.
Cultivo y cuidados
- Suelo y pH: Prefieren suelos ácidos (pH 5.0-6.0). En zonas con suelos alcalinos, se corrige la tierra con turba rubia, compost ácido o sulfato de aluminio.
- Luz: Sol indirecto o sombra parcial. Evitar la exposición al sol del mediodía, especialmente en provincias cálidas.
- Riego: Mantener el suelo húmedo, pero sin encharcar. Usar agua de lluvia o baja en cal para evitar alterar el pH.
- Abono: Fertilizar con productos para plantas acidófilas (como fórmulas con quelatos de hierro) en primavera y otoño.
Poda y mantenimiento
- Época ideal: Podar inmediatamente después de la floración para no afectar los pimpollos del próximo año.
- Forma: Eliminar ramas secas o cruzadas y darle forma al arbusto para estimular un crecimiento compacto.
- Plagas: Controlar cochinillas y arañuelas con jabón potásico o neem.
Sustrato
- Mezclar la tierra con corteza de pino para mejorar el drenaje y la acidez.
Variedades destacadas
- ‘Rosebud’: Flores rosadas, perfectas para macetas.
- ‘Herbert’: Tonos lavanda, resistente a heladas suaves, ideal para zonas frías.
- ‘Red Wing’: Rojo intenso, excelente como punto focal en jardines bonaerenses.
Diseño con azaleas dobles
- En macetas: Usarlas en terrazas o patios combinadas con helechos y hostas para contrastar texturas.
- Canteros florales: Plantarlas en línea para crear bordes en jardines de estilo rústico.
- Sombra arbórea: Distribuirlas bajo árboles como jacarandás o ceibos, respetando sus raíces superficiales.
Adaptación al clima argentino
- Norte subtropical: Proegerlas del calor extremo con cortezas de árboles.
- Sur patagónico: Cultivarlas en invernaderos o cerca de paredes que las resguarden del viento.
Con los cuidados adecuados, estas joyas florales transformarán tu jardín en un espectáculo de color y elegancia.